Dir.: Roman Polanski.
Inter.: Leon Niemczyk, Jolanta Umecka, Zygmunt Malanowicz.
Polonia 1962 | 94 min.
No es el primer largometraje de Polanski pero como si lo fuera, ganó el premio Fipresci en el Festival de Venecia de 1962 y fue candidata al Oscar a la mejor película extranjera en 1963. Es el film que le dio la fama.
Una pareja que va a pasar el día navegando recoge a un autostopista y le invitan a que suba al barco. Se establece un extraño triángulo en que afloran las tensiones de clase, sexo etc....
Es un film de esos en los que aparentemente no pasa nada, pero en la que la acción soterrada no da tregua. Es un film lleno de tensión y suspense que Polanski maneja con mano maestra. Ya en el 1962 sus personajes son encerrados en situaciones límite e irrespirables, como lo harán muchos de sus personajes en muchas de sus películas. A pesar de los años que han pasado desde que el film se rodó, no ha envejecido sino que sigue siendo una propuesta innovadora y tremendamente moderna. Los encuadres y la fotografía son tan rompedores como el primer día. Un film extraordinario, INPERDIBLE.
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