Título Original: “Sans Lendemain”
Dir.: Max Ophüls
Inter.: Edwige Feuillére, George Rigaud, Daniel Lecourtois.
Francia 1939 / 82 min.
***
Memorable melodrama rodado en Francia a las puertas de la Segunda Guerra Mundial que supuso un gran éxito personal para Edwige Feuillére, que hace un gran trabajo como la atormentada Babs, y supuso también un éxito para su director. Es la historia de una mujer al límite, las mujeres de los films de Ophüls casi siempre lo están, ésta, aparte de actuar en un cabaret parisino de top-less, si, si estamos en el 39, tiene un hijo y se reencuentra con un amor de antaño, al que había abandonado sin explicaciones, ahí es nada. Como digo, al límite, pero esto tampoco es lo más importante pues Ophüls se las arregla para hacerlo creíble y que sigamos con pasión las tribulaciones de Babs. Es de esos films que se sabe que van a terminar fatal, incluso la propia Babs lo sabe, pero no quita para que el personaje, actúe con gran pasión, incluso en las decisiones más inverosímiles. No es de las mejores películas de Ophüls, Carta de una Desconocida, es del mismo pelo pero muy superior a esta. De todas formas, no es un film desdeñable, ni mucho menos, aparte de la Feuillere, el film está magníficamente ambientado en un París muy de cine negro, lleno de oscuridad, dudosos cabarets y personajes ambiguos.
Memorable melodrama rodado en Francia a las puertas de la Segunda Guerra Mundial que supuso un gran éxito personal para Edwige Feuillére, que hace un gran trabajo como la atormentada Babs, y supuso también un éxito para su director. Es la historia de una mujer al límite, las mujeres de los films de Ophüls casi siempre lo están, ésta, aparte de actuar en un cabaret parisino de top-less, si, si estamos en el 39, tiene un hijo y se reencuentra con un amor de antaño, al que había abandonado sin explicaciones, ahí es nada. Como digo, al límite, pero esto tampoco es lo más importante pues Ophüls se las arregla para hacerlo creíble y que sigamos con pasión las tribulaciones de Babs. Es de esos films que se sabe que van a terminar fatal, incluso la propia Babs lo sabe, pero no quita para que el personaje, actúe con gran pasión, incluso en las decisiones más inverosímiles. No es de las mejores películas de Ophüls, Carta de una Desconocida, es del mismo pelo pero muy superior a esta. De todas formas, no es un film desdeñable, ni mucho menos, aparte de la Feuillere, el film está magníficamente ambientado en un París muy de cine negro, lleno de oscuridad, dudosos cabarets y personajes ambiguos.
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