Crítica de la película DOLOR Y DINERO

Dir: Michael Bay
Int: Mark Wahlberg, Dwayne "The Rock" Johnson, Anthony Mackie, Ed Harris
EEUU 2013 / 130 min.

Un monitor de gimnasio con más músculo que cerebro, empieza a obsesionarse con la conquista del sueño americano. Bajo el efecto de los anabolizantes, un secuestro parece muy fácil. Pero la realidad se complica cuando sus socios son otros dos mastuerzos hinchados de esteroides y con muy pocas luces.

Los sucesos que siguen son terribles y surrealistas, sobre todo, porque ocurrieron en la realidad, en Los Ángeles, en 1995. 

Y es de estos casos en que esa realidad supera a la ficción. Hasta tal punto, que cuesta creer tanto despropósito junto. La clave de humor barato y violencia machista que adopta Bay no ayuda en nada.

Quizá si esta historia la hubieran adaptado los Coen, le habrían sacado más jugo, con ayuda de su fino sarcasmo. Bay, sin embargo, acaba convirtiendo a estos tipejos en tres seres "adorables", aunque estúpidos hasta el paroxismo, sin rematar en ningún momento la crítica de su país y de su caducado sueño americano. 

Y si Dolor y Dinero no consigue ser entretenida todo el tiempo, lo que sí consigue es ser grotesca y burda hasta el final.  En definitiva, una cinta con muchísimo músculo (mucha acción, muchos efectos) y con muy poca chispa (algo que le sucede a uno de los personajes, por cierto). 

Tampoco se podía esperar mucho más del director de Transformers, Armageddon y La Roca, la verdad.

J