Crítica de la película LA LLORONA, entre un relato de terror y una película política, cuenta uno de los episodios más terroríficos de la historia de Guatemala... *****

Dir: Jayro Bustamante. Int: María Mercedes Coroy, Sabrina De La Hoz, Julio Diaz, Juan Pablo Olyslager, Ayla-Elea Hurtado, María Telón, Margarita Kénefic. Guatemala, 2019. 96 min. 

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Por Juan

Jayro Bustamante ya demostró en Temblores una narrativa cinematográfica fuera de lo común, y también, una querencia por temáticas con un componente claro de denuncia social . En La Llorana el realizador guatemalteco se sumerge pero tangencialmente en el genocidio de los indígenas mayas a manos del ejército durante la guerra civil de su país. Jayro crea tensión a través de planos largos, muy cuidados, muy bien iluminados, con detalles de vestuario y de color perfectos, con una progresión sin prisas, y que están cargados de contenido. Ese manejo de la tensión, de la acción y de los movimientos de las actrices dentro de la escena, consigue que te quedes hipnotizado desde la primera secuencia del film, donde vemos a una familia guatemalteca de clase alta rezando, hasta un final revelador y fantástico.  Por cierto, no leáis ninguna sinopsis sobre esta película, ni veáis el tráiler, hay spoilers lamentables...

Jayro Bustamante apunta maneras maestras en su puesta en escena y mezcla géneros con mucha sutileza. En sus manos, esta mezcla funciona. El dramatismo realista de la historia tiene un tratamiento visual diferente, con primeros planos de los personajes, y un uso virtuoso del sonido, donde cada pequeño ruido cuenta y todo resulta tremendamente inquietante. Y es que los sucesos por los que se le juzga al coronel son como para provocar verdadero estupor. 

El mundo de los fantasmas y el misticismo indígena de los mayas ixil, habitan toda la película y la hacen suya a través de La Llorona, un espectro del folclore hispanoamericano que pena por la muerte de sus hijos ahogados, y que sintentiza ese dolor de todo un pueblo que fue casi exterminado entre 1982 y 1983 a manos del ejército. La masacre se llevó por delante a 1.771 personas, de las cuales un 38% eran niños menores de 12 años. INPERDIBLE total.