Crítica de la película LA TÊTE CONTRE LES MURS

Dir.: Georges Franju
Inter.: Pierre Brasseur, Paul Meurisse, Jean-Pierre Mocky, Anouk Aimeé.
Francia 1959 / 95 min.

Primer largometraje de Franju, tras varios cortos y mediometrajes que habían sorprendido, entre ellos destacaría La sangre de las bestias, un mediometraje rodado en dos de los mataderos de París. Jean-Pierre Mocky había adaptado una obra de teatro de gran éxito para la pantalla y pidió a Franju que la dirigiera. Es una obra seca y dura sobre la función de los manicomios. Es un film con todos los ingredientes de cine negro, un manicomio que parece más una cárcel que un hospital. Un “respetable” padre banquero que más parece un “padrino” y un héroe que es un anti-héroe y un perdedor. La primera secuencia del film es muy esclarecedora, el protagonista hace motocross sin ningún camino ni rumbo, que es lo que le ocurre al personaje. François Gerane no cejará en el empeño de huir del manicomio, en una de las infructuosas huidas le acompañara otro interno interpretado por un esplendido Charles Aznavour. Como ya he dicho es una película seca y dura, de las que no da respiro. Todo ésto en un blanco y negro bastante desolador. INPERDIBLE.